VISIBLES Y TRANSGRESORAS

viséEs preciso explorar vías para codificar nuevos lenguajes narrativos y visuales que incorporen la perspectiva de género en la construcción de la paz y que sean parte constitutiva de un nuevo marco que ponga en valor las estrategias de no violencia y los aportes de las mujeres.

Visibles y transgresoras tiene entre sus objetivos poner en valor las contribuciones de las mujeres en la construcción de la paz y facilitar nuevos referentes para su representación visual. Porque como describe Carmen Chaves Rubio (2002) “La experiencia femenina no se recoge tan fácilmente en los lenguajes que crean opinión pública y analizan y muestran la realidad hoy (…). En parte, porque los discursos dominantes no suelen recoger las prácticas pacíficas que se apartan de las lógicas que sostienen la violencia y el poder”.

Este Estudio otorga un papel clave a las imágenes como mecanismos simbólicos de representación (simplificación) de la realidad y por su importancia en la construcción de referentes y valores que son compartidos en el imaginario colectivo de una sociedad. Esto es aún más significativo para aquellos colectivos y organizaciones que quieran promover mensajes transformadores en el ámbito de lo social dado que la representación visual constituye un vehículo de acceso directo a las emociones, siendo a menudo las imágenes más eficaces que la palabra.

Este enfoque se relaciona con los planteamientos de Antoni Gutiérrez-Rubí (2009)2 que propone “pensar en imágenes, recuperar la expresión artística y de las artes visuales para la comunicación del pensamiento social y político. Imaginar las ideas, imaginando sus iconos y símbolos. Conectar los sueños y las propuestas con su visión, con su representación. Imágenes para cambiar el mundo”.

Este Estudio aborda desde un enfoque amplio y positivo el concepto de paz. Los aportes de las mujeres a la construcción de la paz van más allá de su oposición a las guerras, incorporan también la deconstrucción de las formas estructurales de violencia que afectan a su vida diaria, a las de sus familias y comunidades. Se ha tomado como elemento de análisis sus relatos de vida y la simbología que aportan las palabras y las imágenes que se recogen en la publicación de CEIPAZ “1325 mujeres tejiendo la paz”. Cuando ha sido posible, también se han identificado imágenes externas que ilustran desde otros registros los valores y conceptos que son objeto de esta reflexión.

Este marco transgresor se compone de tres tipologías o conjuntos de valores y conceptos que se superponen y relacionan entre sí: valores inclusivos, valores universales y valores emancipados. Es la composición y justificación de estas tres tipologías de valores lo que permite denominar “transgresor” a este marco conceptual. Se toma para ello la definición que Marcela Lagarde y de los Ríos (2005) hace de las mujeres transgresoras como aquellas que no habitan el orden dominante sino otro paradigma, otra propuesta y alternativa diferente. Son mujeres con una visión filosófica y ética compleja, con una visión analítica del presente que se proyecta mediante estrategias políticas para el cambio y la transformación de la realidad. La transgresión es una experiencia compleja, una plataforma política y filosófica en la que se sitúan las personas que no están afiliadas al orden dominante.

Valores inclusivos
Como punto de partida para caracterizar el marco transgresor se analiza el conjunto de “valores inclusivos”. Son aquellos que sirven como fundamento para percibir la realidad en relación con otras y otros, donde la colectividad y sus diversas manifestaciones forman parte irrenunciable de la identidad del sujeto. Acorde a esa percepción las mujeres en su práctica de la paz trabajan con una nítida conciencia de pertenencia a la colectividad, promueven la unión y la solidaridad, así como el trabajo en red. A través de los afectos construyen, fortalecen, alimentan y sostienen al grupo como una manera de estar en el mundo. Esta respuesta inclusiva se nutre en gran medida de la vivencia de las mujeres como responsables tradicionales del espacio de lo común, de la reproducción y del cuidado, de las labores denominadas también de “maternaje”, pero no sólo de ella. Es también la experiencia de las mujeres como individuos situados en la periferia del poder lo que las permite identificarse como grupo que comparte unas necesidades similares, tomando conciencia de que difícilmente sus necesidades serán satisfechas sin mediar un proceso de empoderamiento colectivo.

  • COLECTIVIDAD, UNIÓN, RED, SOLIDARIDAD, SORORIDAD
  • AFECTOS, VÍNCULO, CUIDADO

Valores universales
Fruto de la experiencia femenina, los valores que se identifican como inclusivos se completan con las demandas de equidad como valor irrenunciable, dando lugar a un conjunto de “valores universales”. Lo muestra su trabajo tenaz por alcanzar la igualdad de oportunidades de quienes sufren exclusión, siendo dinámicas e impulsoras del cambio social, defendiendo la diversidad y el pluralismo, las minorías, así como el diálogo como estrategia para tender puentes, haciendo de la fuerza de la palabra un instrumento de vínculo e integración. Es de gran relevancia constatar en sus trayectorias vitales una manera de defender la equidad que trasciende fronteras nacionales, religiosas y/o económicas, por ello identificamos como un valor frecuentemente compartido su defensa de la equidad universal.

  • EQUIDAD, IGUALDAD DE OPORTUNIDADES, ESTAR EN RELACIÓN
  • DIVERSIDAD, PLURALISMO, INTERCULTURALIDAD
  • DINAMISMO, MOVIMIENTO, CAMBIO
  • DIÁLOGO, CREAR PUENTES, LA FUERZA DE LA PALABRA

Valores emancipados
Pero es el conjunto de “valores emancipados”, asociados al ejercicio de la autonomía, de la libertad y la independencia de criterio y acción, de la elección libre, lo que constituye su peculiaridad más transgresora, situándolas fuera del orden dominante. En las historias de vida objeto de este Estudio se ha identificado que muchas de las protagonistas experimentan la práctica de la paz como un proceso íntimamente vinculado al ejercicio de la libertad de pensamiento y acción, a pesar de los riesgos que ello les comporta. Son ellas quienes alumbran alternativas que suponen, en la mayoría de las ocasiones, ruptura con lo establecido, nuevas miradas que resignifican la realidad desde otras perspectivas, que generan ideas radicales (que van a la raíz) con la confluencia de la creatividad como estrategia para encontrar resquicios y opciones nuevas al sistema hegemónico. Mujeres que piensan y actúan con valentía y audacia, que trabajan buscando la oportunidad y asumiendo los riesgos de ir a contracorriente. Mujeres que desde la resistencia no violenta, la perseverancia y la rebeldía han conquistado derechos para todas las personas. Entre ellas también se identifican a las mujeres resilientes, las que deciden superar su condición de víctimas para, recuperándose del daño sufrido, aportar lo mejor de sí a su comunidad. Podemos decir que, en su gran mayoría, estas mujeres protagonistas optan por el ejercicio de la alegría como manera de estar en el mundo, como espacio conquistado para el optimismo y la esperanza, haciendo del sentido del humor una estrategia contagiosa y transgresora que, además, incomoda y perturba al poder.

  • LIBERTAD, LIBERACIÓN, EMANCIPACIÓN, RUPTURA
  • CREATIVIDAD, GENERAR NUEVAS IDEAS Y PENSAMIENTO, OTRAS MIRADAS
  • VALENTÍA, RIESGO, AUDACIA, OPORTUNIDAD
  • RESISTENCIA, REBELDÍA, PERSISTENCIA
  • RESILIENCIA, RESURGIR DE LAS CENIZAS, RECUPERARSE, EMPEZAR DE NUEVO
  • ALEGRÍA, ESPERANZA, SENTIDO DEL HUMOR, OPTIMISMO

Nacer mujer no implica ser transgresora, incluso muchas mujeres no lo son aún siendo su deseo mejorar las condiciones de vida de las mujeres, ya que no disponen de una visión del mundo que corresponda con sus deseos de cambio. No se trata de enfrentarse al orden dominante desde un planteamiento tradicional, binario, en blanco y negro, donde los códigos que empleamos sean los mismos que queremos desafiar. La transgresión implica la búsqueda de alternativas y propuestas conceptualizadas desde un marco propio, no meramente antagónico, que ponga en el centro a las personas y los valores de equidad y justicia social.

Desde este análisis, lo que hace especialmente valiosas a las mujeres en su práctica, sostenimiento promoción de la paz en el mundo es su manera inclusiva, perseverante, universalista y audaz de hacer las paces. Esa manera es la que intentamos sintetizar en los valores integrados en el marco transgresor como una combinación dinámica de valores inclusivos, universales y emancipados. Son ellas las que, conectadas a su experiencia vital, han resignificado valores tradicionalmente asignados a las mujeres para ejercerlos desde la autonomía y la elección propia, impulsadas por los valores universales de justicia, equidad y no dominación, y no desde el mandato de madre o esposa, alejándose con su manera de pensar y estar en el mundo de la perspectiva esencialista que vincula a las mujeres y la paz como algo “natural”, propio de su naturaleza.

Fomentar la (re)presentación de los valores que conforman el “marco transgresor” de mujeres y paz permitirá fortalecer una narrativa alternativa a los marcos dominantes. Se mostrará una realidad que existe y que debe ser (re)presentada para superar la tradicional invisibilización de esas otras maneras de ser mujer, más allá de las prescritas.

Si el marco transgresor constituye un liderazgo ético, se debe trabajar creativamente para elaborar una estética que se corresponda a los valores que lo integran, que supere los modos que invisibilizan a las mujeres, las representaciones misóginas y machistas, las infantilizaciones, la insistencia en los estereotipos, la utilización y fragmentación del cuerpo femenino como objeto sexual y de consumo, la cosificación, la victimización y todas aquellas estéticas que entran en contradicción con los valores que hemos identificado claves para la equidad, la paz y la justicia social y que ocultan y distorsionan las capacidades estratégicas de las mujeres en su práctica de la paz.

Las imágenes que se incluyen en este sitio Web  están organizadas de acuerdo al valor que predominantemente representan, para que puedan ser así consultadas. Los doce valores identificados son:

  • COLECTIVIDAD, UNIÓN, RED, SOLIDARIDAD, SORORIDAD
  • AFECTOS, VÍNCULO, CUIDADO
  • EQUIDAD, IGUALDAD DE OPORTUNIDADES, ESTAR EN RELACIÓN
  • DIVERSIDAD, PLURALISMO, INTERCULTURALIDAD
  • DINAMISMO, MOVIMIENTO, CAMBIO
  • DIÁLOGO, CREAR PUENTES, LA FUERZA DE LA PALABRA
  • LIBERTAD, LIBERACIÓN, EMANCIPACIÓN, RUPTURA
  • CREATIVIDAD, GENERAR NUEVAS IDEAS Y PENSAMIENTO, OTRAS MIRADAS
  • VALENTÍA, RIESGO, AUDACIA, OPORTUNIDAD
  • RESISTENCIA, REBELDÍA, PERSISTENCIA
  • RESILIENCIA, RESURGIR DE LAS CENIZAS, RECUPERARSE, EMPEZAR DE NUEVO
  • ALEGRÍA, ESPERANZA, SENTIDO DEL HUMOR, OPTIMISMO